APRENDE A RECIBIR Y AGRADECE CADA DON
Recibir y a Agradecer cada Don.
A veces por nuestra nesecidad compulsiva de buscar aprobación, de ser amados/as y aceptados/as, nos resulta mas fácil dar que recibir. Tendemos más a complacer al otro que ser complacidos. Sin embargo, el equilibrio entre dar y recibir no sólo es saludable, sino que resulta necesario si queremos tener relaciones sostenibles. Para llegar a dar de manera consciente y altruista y sobre todo sin esperar nada a cambio debemos tener un nivel de consciencia elevado en el que probablemente ninguno de nosotras/os usuarios de este blog nos movemos todavia. Eso quiere decir que, detras de nuestra generosidad, a veces generosa, a veces necesitada es my probable que exista una soterrada intención de aprobación, un deseo profundo de ser gustado y amado. Y por supuesto un deseo igual de grande de ser tratados como mismo tratamos. Evidentemente este proceso no es obvio o deliberado. Cuando doy, doy honestamente, no diseño en mi dar el como, cuando o cuanto quiero que valores o me devuelvas lo que te doy, pero paralelamente a otro nivel mas profundo esta expectativa se genera. Por ello, para evitar desepciones, expectativas no cumplidas, persecuciones y conflictos hacia el recipiente de nuestra generosidad, mejor de antemano entrenarnos en recibir con gratitud y abiertamente en la misma medida que podemos dar.
Cuando recibo, no siempre directamente de la persona a la que di, se produce un equilibrio, una satisfaccion. También al aprender a recibir, aprendo a salirme del esquema cerrado y rigido de esperar las cosas de una manera determinada, aprendo a recibir lo que viene como viene, y con ello aprendo a ser flexible, a valorar y consecuentamente a ser mas libre.
Como siempre pondré ejemplos que espero aclaren de manera práctica la propuesta de la semana.
Primer ejemplo: Simplemente recibir en cualquier contexto. Te ha pasado de estar con amigos/as tomando un cafe, y a la hora de pagar crearse una situación absurda alrededor de la cuenta y quien la paga? el típico
a: yo pago deja
b: no , no tranquila yo pago que tengo suelto
a: no no que yo tambien tengo suelto
b: que no, que ya está guarda eso, no seas pesado
a: camarero por favor cobre de aqui....
Bueno he dramatizado la situación para que nos entendamos, pero seguro que en alguna ocasión te has visto en una situación parecida. Que diferente si B hubiera respondido directamente, GRACIAS.
Una sensilla palabra que tanto nos cuenta decir a veces. El simple gesto de recibir, implicito en esas GRACIAS, es el que queremos entrenar esta semana. Respiro, recibo, agradezco. Y con ello paradojicamente estoy dando, dando al otro/a la oportunidad de regalarme, dando al otro/a el placer de dar. ( me vas siguiendo).
Segundo ejemplo: Agradecer momentos, situaciones cotidianas que a veces doy por obvias y que sin embargo puedo y debo agradecer, el abanico de cosas abarca desde dar las gracias por que me levanto lleno de vida, viva, tengo techo, comida, etc...pasando por encuentro aparcamiento, me llama un amigo/amiga, veo a un niño reir, una flor que nace en la grieta en una pared, o cualquier acto cotidiano que pasa por mi vida sin que le preste atención. Acuerdate también de agradecer las cosas que en apariencia podrían resultar negativas y que por alguna razon aparecen en tu vida.
Tercer ejemplo: Agradecer la forma en la que los demás me dan. A veces, como decía en la introducción, debido a mi inflexibilidad, ego, rigidez, expectativas... no puedo ver lo que el otro o la vida me da ya que tengo una idea fija, preconcebida, de lo que estoy esperando y de la forma en la que deseo que aparezca. Por ejemplo, estoy en una relacion de pareja en la que tengo la sensasión de dar mas de lo que recibo, ( te suena?) sin embargo si entreno la humildad y la capacidad de recibir puede que descubra que el otro/otra me estan dando mucho, tanto o mas de lo que yo doy, sólo que en una forma que por no ser la que espero casi no puedo percibir. Me decia una amiga una vez que la forma de ver pajaros salvajes en la naturaleza es crear la imagen del pajaro que esperas ver en tu cerebro para que el ojo lo busque o lo encuentre. Pues seria algo asi, porque tengo una imagen, un formato creado de como deberian darme, no puedo recibir lo que me dan. Me creo la imagen de un colibrí y eso es lo que mi cerebro, mi ojo, busca. Ya puedo tener delante un mirlo blanco y no verlo porque estoy programada para unicamente recibir un colibrí. Me sigues?
La consecuencia de no ser capaz de recibir, es que tarde o temprano me voy a cansar de dar, me voy a sentir vacio/a, incluso tendre un discurso perseguidor en el que acuso al otro/a por haber recibido todo lo que yo doy ( a pesar de que dar fué aparentemente una libre elección).
Entrenemos esta semana el don y la capacidad de recibir y agradecer. Recuerda también que la relacion entre dar y recibir no tiene que ser proporcional ni en tamaño ni en la persona que "devuelve" lo que yo di, asi que yo te puedo dar a ti y recibir de otro, concreto o abstracto. Puedo dar algo aparentemente insignificante y recibir algo enorme, porque esos conceptos son conceptos cerrados y de medidas humanas, DAR Y RECIBIR son actitudes, formas de estar en la vida y no se pueden medir.
Bueno te deseo buena semana, cuentame como te va.
